Simpatizando con el enemigo

Cuando los villanos del cine nos cautivan

Cuando los villanos del cine nos cautivan

La lucha entre el bien y el mal ha estado presente en la ficción desde siempre, héroes y villanos representando lo bueno y lo malo del ser humano. Pero cuando los villanos del cine nos cautivan, ¿qué motiva estos sentimientos? ¿Qué nos atrae de personalidades como la de Hannibal Lecter, el psicópata canibal más famoso del celuloide?

Al inicio estaban claramente diferenciados, no solo por sus acciones sino también por su aspecto. En los primeros westerns el bueno iba vestido de blanco y el malo de negro, incluso los caballos eran blancos y negros. En estos casos todos queremos que gane el bien.

La (in)explicable atracción por ‘el malo de la película’

Pero, ¿por qué ahora muchas veces nos atrae más el malo o la mala de la historia? Aunque incumplan la ley vemos si lo hacen por una buena causa, como Robin Hood que roba a los ricos para ayudar a los pobres.

A todos nos gustan los ladrones de bancos como en la serie «La casa de papel» (2017-2020) o los que roban a gente muy rica, como sucede en la película «Ocean’s Eleven» (2001). Las películas en las que el plan consiste en engañar a alguien no son solo entretenidas, sino que queremos que los protagonistas se salgan con la suya, véase Paul Newman y Robert Redford en la película «El golpe» (1973). En estos casos normalmente no suele haber muertes y los dueños del dinero tienen mucho, así que no nos sentimos culpables por posicionarnos del lado del ladrón.

Sin embargo, los crímenes van escalando y los villanos siguen siendo atractivos. El argumento nos cuenta su historia, cómo han llegado hasta ese punto y nosotros empatizamos con ellos al saber el origen de su maldad. Tienen carisma y sentido del humor, mientras que el bueno es aburrido.

Escena de Robin Hood rescatando al pueblo en la película «Robin Hood» (2010) | Vídeo en el canal «Movieclips»

¿Con qué empatizamos cuando los villanos del cine nos cautivan?

Incluso los psicólogos estudian este fenómeno. En una investigación publicada en la revista «Psychological Science» concluyen que encontramos agradables a los villanos ficticios porque compartimos similitudes con ellos. Eso da un poco de miedo, pero lo fundamental según el estudio es que son ficticios, si fueran reales ya no lo veríamos tan bien. La ficción nos da la distancia que no tenemos cuando los villanos son reales.

La psicología nos da dos razones para empatizar con los villanos:

  • Vemos que hay congruencia entre sus pensamientos y sus acciones.
  • Son capaces de realizar acciones que nosotros no podemos pero nos gustaría.

A continuación, vamos con algunos ejemplos que nos han ganado el corazón:

Dexter Morgan en «Dexter»

Trailer de la serie «Dexter» | Vídeo en el canal «Dexter on SHOWTIME»

Es un hombre con instintos homicidas desde pequeño cuando empieza matando animales, pero que cuando se hace mayor ya no se conforma con eso y empieza a matar seres humanos. Su padre, policía de profesión y que ha visto la naturaleza asesina de su hijo, intenta protegerlo enseñándole los trucos de la policía y dirigiendo su ‘vocación’ a matar a los que según ellos se lo merecen.

Aunque estemos en contra de la pena de muerte, tampoco vemos tan mal que Dexter vaya acabando con los criminales que eluden el sistema judicial. Es un psicópata asesino que al principio de la serie no tiene ningún sentimiento. Sin embargo, luego se enamora, quiere a su familia y cada vez se va volviendo más humano.

Walter White en «Breaking Bad»

Un pobre profesor de instituto enfermo de cáncer que ve un futuro muy negro para su familia cuando él muera. Vemos también que el sistema de EE. UU. no ayuda mucho en su situación, necesita un segundo trabajo para ganar algo más de dinero y lo hace en un lavacoches. ¡Cómo de bajo tiene que ser el salario de un profesor en EE. UU.! Además del pésimo sistema de salud en el que si no tienes un buen seguro privado no puedes permitirte ponerte enfermo. Hablamos del protagonista de la serie «Breaking Bad».

Empatizando con ‘el lado oscuro’: cuando los villanos del cine nos cautivan

Con esa premisa te parece normal que ponga en práctica sus conocimientos y fabrique droga, la comercialice ayudado de un exalumno y vaya entrando en el mundo del narcotráfico en el que llegará a ser culpable de alguna que otra muerte. Un hombre débil y sobrepasado por su situación al principio, que cada vez se encuentra más a gusto en su papel y nosotros con él.

«No estoy en peligro, Skyler, yo soy el peligro. Si llaman a la puerta de un hombre y le disparan, ¿piensas que ese seré yo? ¡No! Yo soy el que llama.»

Walter White

Thomas Shelby en «Peaky Blinders»

Escena de ‘Está Dios y están los Peaky Blinders’ con los personajes de Tommy Shelby y Polly Gray en la serie «Peaky Blinders» | Vídeo en el canal «BBC»

Thomas Shelby ya pertenecía a una familia que se dedica al crimen como medio de vida, pero vemos que no es fácil ser delincuente cuando además sufres de estrés postraumático debido a la Primera Guerra Mundial y eres el patriarca de una familia difícil de manejar.

Dentro de lo malo, vemos que quiere a su familia y que le gustaría ser visto como un miembro importante de la sociedad. Estamos a su lado esperando que le salgan bien sus negocios para que tenga una vida decente, pero nos enseña que lo aparentemente legal también tiene su cara oscura.

Arthur Fleck en «Joker»

En la película «Joker» (2019) es cuando vemos como este súper villano, enemigo de Batman, no nace sino se hace. Otra vez un sistema con pocos recursos que no ayuda en este caso a un enfermo mental. Una sociedad que no le da una oportunidad y en la que Arthur Fleck se irá transformando en Joker para poder sobrevivir. Toda una película para explicarte de dónde viene; no solo lo entiendes, sino que lo apoyas.   

Villanelle en «Killing Eve»

Las mujeres también pueden ser malas y Villanelle es muy mala. Una asesina a sueldo sin ningún remordimiento, capaz de matar con sus propias manos, y que además es muy buena en su trabajo.

Villanelle vive una vida de lujo y luce unos ‘modelitos’ de envidiar. Trabaja para una organización criminal, si trabajara para el Gobierno sería una especie de ‘007 con licencia para matar’, pero ella está en el lado de los malos.

Nos gusta desde el principio porque nos divierte. Y según vamos conociéndola también vemos que su vida no ha sido fácil, y que desde luego es muy complicado cambiar de trabajo en ese mundo.

Cuando los villanos del cine nos cautivan… y mucho más

Y es que el cine nos despierta todo tipo de sentimiento, nos emociona y nos hace reaccionar de modos en los que en la vida real ni imaginaríamos.

Si te ha gustado este artículo de ‘Cuando los villanos del cine nos cautivan’, te recomendamos que sigas leyendo más entradas en la categoría ‘El ojo crítico’ del Blog dentro de la Web Follow Your Films. Y hablando de villanos y, en ocasiones, el miedo que provocan, ¿te animas a leer lo que representa «El terror en el cine»?

Autoría del artículo

-Alegsu